El hotel tenía unas vistas geniales y la comida estaba rica, las habitaciones eran espaciosas y aseadas con toallas nuevas cada día, el personal era súper amable. ¡En la playa en 5 segundos! El ambiente del hotel era muy especial con una energía excelente y con un montón de cosas que hacer, como la piscina interior, la piscina al aire libre y la terraza con solárium. Aunque la decoración y la música de la noche eran un poco anticuadas, no afectaron mi estancia en general. ¡Volvería seguro! ☺️

Mi estancia en el Hotel Kaktus Albir en L'Alfas del Pi con mi bebé de 18 meses fue increíble. Felicito al personal por su amabilidad y atención, además de la deliciosa comida. Disfrutamos de una habitación con vistas al mar y un detalle de bienvenida encantador. Las instalaciones de relajación, como la piscina y el acceso a la playa, realzaron nuestra experiencia familiar. Explorar los cercanos Casco antiguo de Altea y el Faro de l'Albir también fortaleció nuestro vínculo familiar. Volvería sin dudarlo.

La piscina en la azotea del hotel con vistas al mar was my favorite spot para tomar el sol y disfrutar de un refresco. Disfruté mucho de la variedad de deportes disponibles y de los paseos por las calles blancas de Altea. La ubicación del hotel era perfecta para explorar la zona, y me encantó la ceremonia del premio Faros de Plata. Sin duda, una experiencia fantástica en la costa española.

Alucina con las mermeladas orgánicas y hallazgos culinarios, convirtiéndolos en leyendas gastronómicas. Además, las habitaciones son amplias y la ubicación es top. ¡Casi lo olvido! La amabilidad del personal es para chuparse los dedos.

Hablando de cosillas, No me gustó que el ambientador tenga aroma a tabaco. La piscina, aunque luce reluciente, es un pelín pequeña y las tumbonas siempre pilladas.

me encantó la limpieza y el buffet variado. La ubicación es perfecta, en pleno paseo marítimo. El personal super atento y amable. Cumplieron con todas nuestras peticiones, ¡incluso con una habitación tranquila con vistas al mar! Y no nos cobraron el garaje al salir. ¡Qué detallazo!

Recomendaría este lugar.

Para nuestras necesidades la ubicación era excepcional y sensacional, justo al lado de las hermosas playas.

Las vistas son regulares.

La habitación era fantástica, tenía un espacio de almacenamiento, café y un escritorio, me ha gustado un montón todo. El desayuno era buenísimo para todos los gustos, tenía una enorme variedad de comida. Una ubicación sensacional cerca de restaurantes y tiendas, a 0 minutos andando de la Platja de l'Albir.

Es un hotel muy limpio y bonito con habitaciones perfectas. Empleados muy buenos con buenos modales. Desayuno muy bueno para todos los gustos y ubicación sensacional. Un servicio de primera clase, un restaurante maravilloso. El check-in es tardío.

Una habitación bien cuidada con camas súper cómodas, y Wi-Fi gratis, un espacio de almacenamiento y café. Un personal excepcionalmente servicial y extremadamente servicial, un registro anticipado.

La habitación del Hotel Kaktus Albir es sencilla pero cómoda. Me encantó la sensación de frescura con el aire acondicionado y el suelo de baldosas. Además, la minibar y la pantalla plana le dan ese toque acogedor que necesitas después de un día largo en la playa.

Quizás las baldosas del suelo eran un poco frías para caminar descalzo.

Una habitación moderna con un enorme baño, de buen tamaño. Un desayuno completo y caliente con panes frescos y con dietas sin gluten y un personal super amigable.

Vecindario hermoso, ubicación céntrica, no muy lejos de un restaurante, de una hermosa playa y también de los autobuses. Situado a 3 km del Museo Del Mar Altea. Habitación lo suficientemente espaciosa y funcional que cuenta con vistas increíbles y con café. Desayuno completo para todos los gustos, servicio estupendo.

El servicio del hotel es de primera clase. Una habitación lo suficientemente espaciosa y funcional con caja fuerte y con café, el personal fue super amigable. Los desayunos eran completos, con panes frescos y con todos los sabores. Una ubicación realmente encantadora y estupenda con parking privado si hace falta, cerca de los autobuses y de restaurantes y de la zona de compras.

Lo que hizo de la estancia una verdadera experiencia de 4 estrellas fue el servicio, que era de primera clase. La habitación era moderna y de buen tamaño, ofrecía un balcón, Wi-Fi gratis y un espacio de almacenamiento. Tuve un desayuno completo, con carne asada, todos los sabores y también panes frescos. La ubicación era realmente encantadora y estupenda - a dos pasos de todos los lugares a los que queríamos ir.

La piscina en la azotea era genial para broncearme, siempre y cuando no te importe esperar una eternidad por un refresco. ¡Las vistas valían la pena! Y pude dejar mis maletas después del check-out, ¡un gran alivio!

No nos daban agua en el comedor! ¡Qué extravagancia pedir agua, verdad?